Durante años, Ub Iwerks fue considerado, no solo como el mejor animador de la industria, sino como el “genio en la sombra” responsable del éxito de Walt Disney. El tiempo y los hechos demostraron en parte lo primero, y desmintieron rotundamente lo segundo.
La carrera de Iwerks se remonta a 1916 en Kansas City, donde trabajaba junto con Walt Disney en el Pesman-Rubin Comercial Art Studio. A partir de ese momento las trayectorias de ambos van unidas, tanto en el Kansas City Film Ad, como en la nueva empresa de Disney, Laugh-O-Gram Films, Inc. Cuando Disney se traslada a Hollywood y funda el Disney Brothers Studio en 1923, Iwerks es uno de sus primeros animadores.
La carrera de Iwerks se remonta a 1916 en Kansas City, donde trabajaba junto con Walt Disney en el Pesman-Rubin Comercial Art Studio. A partir de ese momento las trayectorias de ambos van unidas, tanto en el Kansas City Film Ad, como en la nueva empresa de Disney, Laugh-O-Gram Films, Inc. Cuando Disney se traslada a Hollywood y funda el Disney Brothers Studio en 1923, Iwerks es uno de sus primeros animadores.
Mucho mejor animador que Disney (y también, uno de los más rápidos del negocio), el papel de Iwerks es fundamental en el desarrollo del Estudio Disney tanto en la época muda (en las series “Alice Comedies” y “Oswald, the luky Rabbit”), como en las primeras experiencias sonoras. Los tres primeros cortos de Mickey Mouse y el primer “Silly Simphonies” (“The Skeleton Dance”), fueron prácticamente animados por Iwerks en solitario. Hoy día es generalmente admitido que el diseño original de Mickey Mouse fue obra también de Iwerks.
Aquellos primeros años fueron tiempos duros en el Estudio Disney, y las exigencias de Walt de mayor calidad en la animación fueron poco a poco minando la paciencia y los nervios de Iwerks, quien, por otro lado, acostumbrado a animar casi en solitario, se negaba a adaptarse a los nuevos sistemas de producción y delegar parte de su trabajo en sus asistentes. La situación fue haciéndose cada más tensa hasta que, en 1930, Iwerks decide abandonar a Disney y aceptar una propuesta del distribuidor Pat Powers para crear su propio estudio.
Iwerks, con un pequeño equipo, y nuevamente realizando la animación casi en solitario, produce un episodio piloto de su nueva serie “Flip, the Frog”. Flip es la caricatura de una rana de con guantes y zapatos. Ni este primer episodio, “Fiddlesticks” (el único realizado en color) ni el segundo “Puddle Prank” convencen a Powers, quien presiona a Iwerks para rediseñar el personaje. El resultado es un personaje más agradable a la vista pero con un innegable parecido con Mickey Mouse.
Pat Power consigue vender la serie a MGM, en la que sería la primera incursión de este estudio en el campo de la animación. Iwerks aumenta entonces su plantilla con gente de la talla del músico Carl Stalling o los animadores Grin Natwick, Rudy Zamora, Ivr Spence, Al Eugster y Shamus Culhane. Sin embargo, los resultados no están a la altura de la creatividad de tan extraordinario equipo, y los treinta y siete cortos de Flip (1930-1933), aunque contienen individualmente escenas memorables, no alcanzan en conjunto demasiado éxito.
En 1933, Iwerks prepara dos nuevas series. La primera de ellas, que reemplaza a Flip, es Willie Whooper, y cuenta las andanzas de un muchacho con la habilidad de vivir extraordinarias aventuras con su imaginación. Aunque tanto la animación como las historias eran en general mejores que en los cortos de Flip, Willie comparte con este último la misma carencia de personalidad. La serie nuevamente obtiene un éxito bastante pobre, lo que decide a MGM a no seguir distribuyendo los cortos de Iwerks.
La otra serie creada en 1933 por Iwerks (ya entonces retirado del tablero de animación y en funciones únicamente de supervisión) es Comicolor. Basada en personajes y cuentos clásicos, esta serie esta filmada, como su nombre indica, en color mediante el procedimiento bicromático Cinecolor. En este periodo, Iwerks incrementa de nuevo su personal, contratando a extraordinarios profesionales tales como Otto Englander, Ben Hardaway, Bernie Wolf, Dick Bickenbach, Norm Blackburn, Steve Bosustow y Frank Tashlin. Desde la primera entrega, “Jack and the Beanstalk” (1934) hasta la ultima, “Happy Days”, distribuida en 1936, la serie es irregular, con algunos episodios brillantes y otros francamente pobres.
Al perder el contrato con MGM en 1934, la serie Comicolor seria distribuida por la compañía de Pat Powers, Celebrity Cartoons, pero a través de una compañía modesta no era posible igualar los ingresos generados mediante la distribución a través de un gran estudio como MGM. Forzado por los problemas económicos, el estudio Iwerks cierra sus puertas en 1936.
Hasta 1940 Iwerks trata de sobrevivir como productor independiente consiguiendo subcontratas de Leon Schlesinger (dos cortos de Porky en 1937), o de Charles Mintz (quince cortos para Columbia de 1938 a 1940). Incluso se atrevió con una pequeña serie por su cuenta, llamada “Gran’Pop Monkey”, de la que realizó tres películas que probablemente no llegaron siquiera a ser distribuidas.
Finalmente, y a pesar de las diferencias que los habían separado diez años atrás, Iwerks vuelve a trabajar para Disney. Esta vez no como animador, sino inventando o perfeccionado nuevas tecnologías, especialmente en el campo de los efectos especiales opticos, lo que le valió el reconocimiento de la industria a través de dos premios Oscar. Iwerks permaneció en el Estudio Disney hasta su muerte en 1971.
Podeis ver varias peliculas de Ub Iwerks en Youtube.